Acróbatas
La ilusión de volar entre las invisibles telas de un teatro vacío
He contemplado la belleza de un grupo circense, su denodada voluntad, su paciencia con las telas, su fuerza y libertad. Son individuos veloces, desatados, con la mirada en el alma y el puño en el corazón. Los consume lo sublime, la armonía y la tensión, mientras avanzan con cálculo y de paso en paso hacia el momentum. Al verlos mi alma tirita y apenas alcanzo a moverme. Observar se convierte en el arte y me olvido del retrato. Ahora simplemente vuelo con ellos, con su ballet de formas, con su espectáculo. Soy un acróbata más, llevado por las telas de un teatro vacío, por las alas de una inconfundible fuerza personal. P.R.














